Así es, según la revista japonesa Nikkei, Apple podría estar barajando esta posibilidad para tener un año más de desarrollo para el smartphone que muchos consideran el mejor del mundo.
La explicación de porque los de Cupertino podrían posponer el lanzamiento del iPhone 7 es simple, la exigencia del mercado actual. Para ello estarían dispuestos a "adelgazar" el terminal, tanto que incluso se quedaría sin Jack de 3,5mm para los auriculares. En su defecto, el USB de Tipo-C sería el encargado de hacer su función, haciendo que todo el mundo se pasase a unos supuestos auriculares con esta conexión. Otra de las razones por las que Apple posponiera el lanzamiento del teléfono sería una supuesta mejora de la batería "fuera de serie" con una duración hasta tres veces mayor. A estas especificaciones se les uniría la tan esperada resistencia al agua, una mejora de la cámara y un software para sacar lo mejor de ella.
Es pronto para saber si Apple sacará el iPhone 7 en otoño de este año o lo hará en el que viene, pero viendo las expectativas que se están generando va a estar a la altura o incluso superando a cualquier tope de gama. Es cuestión de tiempo, ya se verá...
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